Crossmedia y ficción: El misterio del amor entre varones
Isaac Sainz
Por primera vez, después de mucho tiempo, sentí emoción por entrar a Instagram y WathsApp, para presenciar la obra crossmedia El misterio del amor entre varones, dirigida por Gilberto Corrales. Y lo que miré me dejó gratamente sorprendido. Porque encontrar en las redes sociales una propuesta artística que utilice los recursos de las mismas, es algo inusitado. Así como encontrar ficción de verdad. Es decir, encontrar lucidez en la construcción de una ficción. Porque allí, en las redes, la ficción se traga a los usuarios de una sola bocanada. Casi nunca nos enteramos que estamos mintiendo, inventando, cuenteando… o que estamos creyéndonos aquello que no estaríamos dispuestos a creer si estuviéramos caminando por la calle mordiendo una manzana.
Y esto es lo que yo más rescato de este trabajo, que me permitió disfrutar, -consciente y genuinamente- de una ficción a través de las redes sociales. La perspectiva con la que invita a navegar entre ellas, dándoles una dimensión estética. Obligándonos a interpretar, siempre obligándonos a interpretar. A detenernos a ver una imagen, solo para descifrarla y degustarla por el puro placer de creer un rato en esa historia que no tiene nada, absolutamente nada de diferente a todas las historias que podríamos encontrar en redes. Salvo que forma parte de una composición estética, que busca brindarte una experiencia en ese sentido y no venderte un producto o sacarte una visita a tal o cual página.
Y entonces allí, ya inmerso en esta otra sintonía, comienzas a disfrutar la calidad de la fotografía (Leo Aldair), el tono melancólico que despierta la gama de sus colores fríos. Comienzas a leer con interés las descripciones y pones atención al cuidado de las breves pero muy sugestivas coreografías (a cargo de Briseida López) con un estilo urbano, que expresan deseo, abandono, pasión. Ves esos videos (Siqueiros Studio) donde los paisajes son embellecidos por la sensación de vastedad, del paso del tiempo, y nutridos de acciones tan sencillas como estar echado en la playa o andar dando vueltas en bicicleta en una estación abandonada. Acciones sencillas, secuencias, muy sencillas pero muy expresivas.
Y así, con fotos, videos, historias, mensajes y audios, se va construyendo la historia del amor entre Carlos y Daniel, que éste recuerda tras la desaparición de aquél y trata de dar respuesta a varias incógnitas.
En este proceso se va develando la personalidad de Carlos y su vida atravesada por distintos temas: la relación con el padre, el amor, la homosexualidad o la desaparición. Permitiéndonos conocer el duelo casi paranoico que sufre Daniel, y que se desarrolla en un tono íntimo, contenido.
Es de mencionar cómo Carlos Valdés y Daniel Piñeiro han logrado entrar de lleno en la tónica de todo el concepto artístico: la interpretación de las coreografías, la forma de habitar los espacios, las corporalidades, las miradas.
En ese sentido se trata de un trabajo redondito, donde lo técnico, lo conceptual, lo creativo y lo interpretativo van de la mano para dar un resultado sumamente limpio, meticuloso, pertinente e innovador.
Este trabajo, producido por la compañía Teatro en el Incendio con el apoyo del FONCA (Sistema de apoyos a la creación y proyectos culturales) se estará presentando todos los viernes (19.00hrs PST) y sábados (17.00hrs PST) hasta el 13 de febrero.