Síntoma de fallidas políticas culturales
A los alumnos y ex alumnos de algún Centro de Educación Artística (CEDART)
A la comunidad artística de Chihuahua
A la comunidad artística de México
A la sociedad en general
Presente:
Hace ya casi dos semanas los alumnos de le escuela preparatoria Centro de Educación Artística “David Alfaro Siqueiros” CEDART- Chihuahua, tomaron las instalaciones de su centro de estudios. Sus demandas se basan en la mejora de las instalaciones del plantel, cambio de administrativos y apoyo federal ya que esta institución depende del Instituto Nacional de Bellas Artes. Esta preparatoria es la única institución de nivel medio superior en el Estado de Chihuahua que oferta una currícula especializada en arte, lamentablemente esta institución se ha caracterizado por el abandono de las dependencias federales a las que se suscribe.
Sabemos de sobra que México está ahora convulsionado por la violencia, el desempleo, y la falta de oportunidades para nosotros los jóvenes. El panorama no es sencillo para nuestra generación, nos enfrentamos a un país que no nos da protección social, escolar, ni de ningún tipo, al contrario muchos somos marcados con el adjetivo nini, ser joven significa ser desempleado, ser desertor escolar, creen que ser joven es estar desencantados de la vida.
Mario Benedetti se preguntaba ¿qué les queda a los jóvenes? Nos queda recuperar el habla y la utopía, nos queda el hacernos escuchar, nos queda el arte y la cultura donde reinventamos y creamos otros mundos, mundos más prósperos, mundos más cómodos para todos.
Así los alumnos del CEDART trataron de hacerse escuchar pero nadie los escuchó. La demanda principal; elecciones transparentes y democráticas dentro de su plantel de estudios para elegir a los directivos que ellos consideran competentes para incidir en los procesos estéticos y culturales que exige su institución. El día 14 de noviembre los alumnos y algunos docentes trabajaron bajo protesta y el miércoles 16 al ver que no había ninguna respuesta decidieron tomar la escuela. Desde ese día los compañeros acampan fuera de las instalaciones y hasta el momento las autoridades no han querido negociar ni abrir un diálogo.
Este panorama se torna decepcionante, no sólo para los compañeros que han perdido tiempo de clase y tiempo creativo. Este panorama es síntoma de la ineficiencia de las políticas culturales de nuestro país. En momentos tan críticos como los que México atraviesa es crucial el apoyo al arte y a la cultura, replantearse otras formas de educación, una educación que se base en valores humanísticos para sensibilizarnos, para abrir los sentidos, para proyectar un mejor futuro.
Por tal motivo hacemos un llamado urgente a toda la comunidad artística de México, a los docentes, alumnos y ex alumnos de los Centros de Educación Artística (CEDART), a todos los compañeros estudiantes, a la sociedad en general, si nos sumamos somos más fuertes que 80 alumnos que duermen y comen fuera de su escuela esperando un diálogo, una negociación. Sí el llamado se vuelve una demanda social sólo les quedará a las autoridades voltear a vernos. Es momento de refrendar lazos y brazos amigos.
Anexa tu firma en apoyo a nuestros compañeros: