Cancelan obra de NL en la Muestra Regional sin previo aviso
Cristina Alanís Cantú y Rubén Emanuel Anguiano Pérez.
Somos un grupo de teatro de Nuevo León, responsables del montaje: U (o todas las Iris de Facebook). En este momento estamos en Durango enfrentando una circunstancia muy penosa y que nos toma por sorpresa. Se suponía que este viernes nos presentaríamos con nuestro montaje en el Teatro Victoria de esta ciudad, por haber sido elegidos como representantes de Nuevo León para participar en la Muestra Regional de Teatro del Noreste. Nuestra Muestra Estatal de Teatro fue a inicios de junio, y fue en esta presentación donde fuimos seleccionados para la Muestra Regional.
Ayer se nos dio aviso que la Secretaría de Cultura había contactado al Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León (CONARTE) para avisar que no podríamos presentarnos porque había un menor de edad en nuestro montaje. Evidentemente, en la obra actúa Diego Salazar, un niño de doce años. Más allá de nuestra opinión o postura frente a tal cláusula, simplemente este criterio no estuvo establecido en la convocatoria de Nuevo León, como sucedió en otros estados.
Al participar estuvimos dentro de la legalidad, prueba de ello es el hecho de que fuimos seleccionados y no hubo reparos o restricciones de parte de los jurados sobre la decisión. Más aún, el personal de CONARTE nos informa que la convocatoria que ellos lanzaron (que no incluye ningún requisito de mayoría de edad) fue validada por la federación (es decir, la misma Secretaría de Cultura), y tiene pruebas de esta aprobación. Aun así, nos informan que la Secretaría de Cultura sostuvo que no se podían romper las reglas que se pretendía fueran para todos los estados (a pesar de que hemos comprobado al compararlas que cada entidad tiene bases diferentes), y que no podíamos presentarnos con un menor de edad en el montaje.
Ni el grupo, ni el estado ha cometido falta alguna y en tanto que no existen bases o reglamento para participar en la Muestra Regional más que la selección del estado, en este caso a través de una muestra estatal, no debería haber veto institucional. Además, habiendo antecedentes en prácticamente todas las emisiones de la Muestra Nacional de Teatro, incluyendo la última emisión, donde participan obras con menores de edad en el reparto y existiendo diversos programas en la propia Secretaría de Cultura donde esto sucede no hay motivo que sustente está decisión.
Se nos propuso reemplazarlo con un mayor de edad, es decir, sondear si existía casualmente un suplente mayor de edad (para un papel que fue diseñado para un niño de doce años por razones artísticas) que pudiera ser mandado a Durango. Como no era el caso, no quedó más remedio que revocar nuestra participación. Esto se nos informa a 3 días de nuestra presentación, siendo que los resultados de la Muestra Regional para Nuevo León se dieron a conocer a mediados de junio.
En todas las presentaciones que ha tenido la obra, hemos establecido frontal y transparentemente que hay un menor de edad colaborando en el montaje. Lo avisamos con anticipación cada vez. De hecho, primeramente la Muestra Regional iba a efectuarse en Chihuahua, y cuando estábamos haciendo los preparativos, esta entidad nos requirió que el niño debía ir a acompañado de un padre o tutor, validando el conocimiento de esta situación y su aceptación.
En Durango durante todos los preparativos para nuestra presentación, el traslado y el contexto especial del niño (que viaje uno de sus padres y su situación escolar) de nueva cuenta fue un tema abiertamente tratado desde hace semanas, cuando todavía estábamos en Monterrey, y del que nunca hubo un reparo al respecto de parte de los organizadores de la Muestra.
Al enterarnos de la noticia, tratamos de negociar una solución. Preguntamos cuál era el motivo para que no pueda participar un menor de edad, con el objetivo de pensar en alguna medida que pudiera remediar el inconveniente; pero no se dio razón alguna según sabemos, salvo que estaba en las reglas y que debía respetarse. Se nos ocurrieron varias formas de solución, incluyendo que nos dieran un plazo para preparar a un mayor de edad, para que luego el jurado pudiera ver la obra, y que CONARTE asumiría los gastos de este aplazamiento de la presentación. Nos pareció buena idea, dado que aún no se llevan a cabo otras de las Muestra Regionales, y al parecer habría tiempo para deliberar los resultados sin prisa. Pero no fue aceptada esta idea, debido según nos dicen a que perturba el formato de la Muestra.
Al no haber ningún requisito por escrito en la entidad que nos corresponde, ni ninguna notificación a tiempo por parte de las autoridades, o acuerdo que nos permita prepararnos para remediar este problema; sólo nos dejan en la penosa situación de no poder participar, siendo que nosotros nos hemos conducido de acuerdo a las reglas en todo momento. Este error emana de la institución, que con el objetivo de evitar afectar a los grupos de otros estados, ignora que nos agravia a nosotros sin merecerlo. Nuestros intereses han sido violentados sin motivo válido, y esto debería ser asumido por la institución para buscar una solución justa.
Precisamente dentro de la muestra, hoy se presentó el grupo que representa a Tamaulipas, Tercer Fénix, a quienes les platicamos nuestra situación, y nos comentaron que esto también ha sido un problema para ellos en su entidad. Al ser mayoritariamente actores jóvenes, el año pasado no pudieron competir en la Muestra Regional por no tener 18 años cumplidos. Este año, previo aviso de esta situación, cambiaron a su reparto para poder participar en la Muestra Regional, quedándose gran parte del elenco original sin poder participar. Nosotros no tuvimos la oportunidad de tener tal aviso a tiempo, por lo que estamos compitiendo en desigualdad de condiciones. De haber sabido que este requisito aplicaría, hubiéramos preparado a un suplente mayor de edad, pero no fue el caso debido a la ineficacia de las autoridades pertinentes en informarnos de esta situación en tiempo y forma, aun teniendo información de sobra por parte de nuestro equipo hacia los comités organizadores de la existencia de un menor de edad, meses atrás.
Nos ha sorprendido también conocer que en otros estados esta restricción limita en gran medida el trabajo de los creadores. En nuestro caso, parte de la propuesta estética del montaje es un reparto intergeneracional. No es una decisión arbitraria, sino diseñada. Este tipo de criterios y restricciones limitan a los creadores a hacer obras con sólo cierto tipos de actores, que es igual de perjudicial que limitarlos a hacer obras sólo en cierto tipo de formato de público, o sólo con cierto número de actores, para poder participar en los circuitos del Estado. Estas condiciones no tienen que ver con la calidad artística de un proyecto, y por ende, no deberían restringir su difusión y participación en los circuitos de muestras y festivales del Estado.
Para finalizar, tampoco debemos olvidar que el derecho del menor Diego Salazar a la cultura y el arte está siendo comprometido al impedirle hacer teatro en un evento organizado por el Estado. El no dar una razón de este impedimento sólo empeora la situación, e impide la búsqueda de soluciones que favorezcan a los muchos artistas jóvenes del país que probablemente también se ven afectados por este criterio.
En este momento nos encontramos en la ciudad de Durango, participando en las actividades de la Muestra Regional, con toda la producción lista para participar, y con las manos atadas.
7 septiembre, 2017 @ 7:36 pm
Totalmente en desacuerdo con esta acción por parte de la Muestra. Para empezar no puede ser un criterio para no participar el tener menores de edad en escena.
7 septiembre, 2017 @ 9:00 pm
¿Falta de criterio unificado, demasiado libre albedrío en la redacción de las convocatorias regionales o negligencia? En cualquier de los casos, los afectados son los integrantes del equipo. Es imposible no encontrar alguna solución para que se pueda presentar este trabajo.
8 septiembre, 2017 @ 2:13 am
Totalmente reprochable esta intervención de ultimo minuto, cuando se pudo haber hecho la aclaración en un tiempo propicio.
Por otra parte: un foro alternativo que dé cabida a la presentación, ya que la institución ha fallado, de manera extraoficial presentar la obra y cumplir con el público interesado, por lo menos.