El Nayarit de los descalabros culturales
César Delgado Martínez
En este sexenio el apoyo del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Nayarit (CECAN) al teatro como el desarrollo cultural del Estado ha sido desastroso, con mínimas excepciones. Por ejemplo: De las seis emisiones de apoyos del PECDA (Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico), sólo se alcanzaron a otorgar cuatro; la aplicación del PACMYC (Programa de Apoyo a Culturas Municipales y Comunitarias), también ha sido irregular, puesto que no se podrán a aplicar las seis emisiones y su calendario de trabajo siempre estuvo desfasado del nacional; no llegó el apoyo a los 20 municipios de la entidad, (alguna cosita por ahí); hubo irregularidades en la aplicación de apoyos etiquetados por la Cámara de Diputados (Federal) y del monto de dinero otorgado anualmente por el desaparecido CONACULTA (Consejo Nacional para Cultura y las Artes); la promoción de la lectura fue casi nula; no hubo ferias del libro; ni publicación de textos; se creó una sala de lectura en Rosamorada, sin lo prometido: equipos de cómputo y tabletas y se trató de despojar a un grupo de artesanos de la tienda Cinco Pueblos, que ocupan de en comodato, entre otras muchas irregularidades, que por cuestiones de espacio no puedo mencionar.
Jamás ha habido transparencia en el presupuesto ejercido por el CECAN, siguiendo la tónica del gobierno del Estado, de no informar nada. A todo el que se ha atrevido a alzar la voz para denunciar alguna irregularidad, se le ha tratado de descalificar por todos los medios. Lo menos que ha dicho el gobernador Roberto Sandoval (con las debidas repeticiones de los funcionarios culturales), que somos “gente sin quéhacer, que nos dedicamos únicamente a criticar”. Como si ellos –los que creen que tienen la razón, porque tienen el poder- pudieran saber lo que hacemos todos “los desquehacerados”.
La rehabilitación de la exfábrica textil de Bellavista en el municipio de Tepic es una entelequia. Se habla pomposamente, de un “centro regional de las artes”, cuando la Escuela Estatal de Bellas Artes, que se fundó hace un poco más de medio siglo, recientemente se unió al programa de Centros de Iniciación Artísticas Asociados del INBA y la escuela de danza que se dio a conocer su apertura, es un salón, donde no existe tal institución. El CEDART Amado Nervo de Tepic, que cuenta con bachillerato de arte y humanidades, se repone después de tres años de difícil vida, ya que por capricho de la que fuera titular de la Secretaría de Cultura y (una vez desaparecida ésta) del CECAN, se fundó en Santa María del Oro y no logró reunir ni el 20 % de los alumnos requeridos.
Hasta hace unos días las obras de rehabilitación de la exfábrica textil de Bellavista estaban paradas, a pesar de que el “Centro Cultural” (así lo anunció en gobierno del Estado), se dijo que estaba terminado, en la Feria de California efectuada en San Diego, Estados Unidos y en el CECUT (Centro Cultural Tijuana).
Así se desenvuelve el desarrollo cultural oficial en el Estado de Nayarit, en un sexenio donde se recibió más presupuesto que en los dos que lo antecedieron y su trabajo ha sido ineficiente y con apoyo sólo a sus amigos y familiares. Es importante poder hablar de todo lo que se realiza en este reglón de una manera autogestiva, ciudadana o independiente (como guste usted llamarlo) y de lo que se está planeando por el centenario de la creación del Estado Libre y Soberano de Nayarit.