Lo descabellado de lo ordinario
Los alumnos del cuarto semestre de la Licenciatura en Teatro de la UABC nos plantean una historia con sucesos absurdos, personajes idiotas, y temáticas de injusticia y despotismo con la obra Idiotas contemplando la nieve.
El contexto es en Tijuana, una Tijuana rutinaria, con gente persiguiendo metas a veces muy simples y otras veces viles. La diferencia entre verlo en una obra y vivirlo en la realidad es que en la realidad uno ya no se da cuenta de qué tanto se asemeja a estos personajes, o qué tan acostumbrados estamos de ver lo absurdo y la idiotez.
Un tono cómico, con sutilezas de un texto que consigue hacernos ver cómo cosas ordinarias en realidad son muy descabelladas y pintorescas, como el falso secuestro de un axolotl —aprovecho para recomendar ese cuento titulado Axolotl, de Julio Cortázar— entre dos medios hermanos.
Lo cierto es que mucho de ese tono logrado se le debe al texto de Alejandro Ricaño, que por su carácter se impone en la escena y rescata la propuesta de unos personajes chistosos, casi arquetípicos y —opino— acertados para el tono que Emmanuel Vega propone con la dirección. Acertados, pero todavía tímidamente interpretados, todavía actoralmente en búsqueda del ritmo propicio, de la velocidad, del aliento que necesita la obra. Esto no quita que cuando alguna escena llega a su clímax, los actores logran ajustarse y nos permiten ver a carcajadas el súmmum de cada anécdota de la historia.
La escenografía es evocativa, conceptual, un tanto elegante, pero que necesita afinar sus transiciones.
Yo diría que fue una función afortunada, una presentación que sigue dentro de los parámetros de un examen, con propuestas creativas, y aun que no termino de ver un discurso concreto, se agradece que no sea un trabajo basado en el clásico discurso de que es una exploración.
Y ya pa´ terminar, nomás pongo en chinga los créditos:
Elenco: Mario Ramírez, Estefanía Loaiza, Sergio Alejandrez, Indhary Ríos, Karen Angulo, Kathya Reynoso, Karen Merchant, Jesalem Guillen, Alejandro Guzmán, Diana Cruz, Varenka Zenteno.
Dirección: Manuel Vega.
Asistente de dirección: Andrea Rodríguez.
Diseño de escenografía: Aarón Carrisoza.
Asistente de escenografía: Cristina Martínez.
Realización de escenografía: Alonso Castro.
Iluminación: Jonatan Gutierrez.
Diseño publicitario: Israel Josafat.